Regreso a Clases Seguro 2024: Cómo Enfrentar las Amenazas de COVID y Mpox

A medida que los estudiantes y maestros  regresan a la escuela este año, la amenaza de enfermedades infecciosas transmitidas por el aire, como el COVID-19 y el mpox, sigue siendo una preocupación significativa. A diferencia de años anteriores, en los que muchos esperaban que el COVID-19 se convirtiera en un virus estacional como la gripe, la realidad es que continúa circulando durante todo el año, sin un patrón estacional claro. Este año, tanto el COVID-19 como el mpox presentan desafíos que las escuelas deben abordar para mantener seguros a los estudiantes, el personal y las comunidades.

 

COVID-19: Una amenaza durante todo el año

A pesar de que la emergencia sanitaria global ha terminado oficialmente, el COVID-19 sigue siendo impredecible. Los datos de las tendencias de aguas residuales en Canadá y de las visitas a salas de emergencia en Estados Unidos muestran que la positividad en las pruebas de COVID-19 y las visitas a las salas de emergencia han aumentado constantemente desde la primavera, aunque las hospitalizaciones y muertes siguen siendo menores que en años anteriores. La persistencia de nuevas variantes, como JN.1, KP.2 y LB.1, ha complicado la situación, permitiendo que el virus eluda la inmunidad de las vacunas y las infecciones previas, lo que aumenta el riesgo de reinfección.

 

El Surgimiento del mpox como una preocupación de salud pública

Al mismo tiempo, el mpox (anteriormente conocido como viruela del mono) ha resurgido como una preocupación de salud pública, con la Organización Mundial de la Salud declarándolo una emergencia de salud pública de preocupación internacional. Los niños son particularmente vulnerables, y a medida que las escuelas reabren, es esencial mantenerse vigilantes y tomar medidas de protección para reducir el riesgo de brotes dentro de las escuelas y comunidades. El mpox se propaga a través del contacto cercano, incluido el contacto de piel a piel, superficies contaminadas e incluso partículas en el aire.

Enfermedades adicionales transmitidas por el aire

Aunque el COVID-19 y el mpox siguen siendo preocupaciones prioritarias, los consejos de regreso a clases de Commit to C.A.R.E. también son efectivos contra la transmisión aérea de la influenza, los resfriados comunes y el Parvovirus B19.

 

Creando un entorno escolar seguro

Con ambas amenazas, el COVID-19 y el mpox, las escuelas deben priorizar la salud y seguridad para prevenir la propagación de estos virus. El eBook Lugares de Trabajo y Escuelas Más Saludables de Commit to C.A.R.E. ofrece un enfoque integral para mitigar los riesgos de enfermedades infecciosas transmitidas por el aire en entornos educativos. Exploremos algunas recomendaciones clave:

 

1. Mejorar la ventilación

Una buena ventilación es crucial para reducir la transmisión de virus en el aire. Los sistemas HVAC desactualizados en las escuelas a menudo no pueden filtrar o circular el aire fresco de manera eficiente, lo que puede llevar a la acumulación de partículas dañinas en el aire. Las escuelas deben:

• Asegurarse de que los sistemas HVAC estén correctamente mantenidos, con filtros limpios o reemplazados según sea necesario.
• Maximizar la circulación del aire con purificadores de aire en las aulas que tengan una alta Tasa de Entrega de Aire Limpio (CADR, por sus siglas en inglés) para eliminar partículas similares en tamaño a los virus.
• Usar ventilación natural siempre que sea posible, abriendo ventanas o puertas para aumentar el flujo de aire.

Mejorando la ventilación, las escuelas pueden ayudar a reducir la concentración de virus en el aire, creando espacios más seguros para estudiantes y personal.

 

2. Distanciamiento físico y uso de mascarillas

Las aulas abarrotadas, los pasillos y las áreas comunes son entornos de alto riesgo para la transmisión de enfermedades infecciosas. Las escuelas deben:

• Mantener el distanciamiento físico siempre que sea posible, como espaciar los escritorios entre 3 y 6 pies y fomentar el tráfico en un solo sentido a través de los pasillos.
• Utilizar espacios al aire libre para el aprendizaje o recintos más grandes como auditorios para las clases.
• Fomentar el uso de mascarillas durante períodos de alta transmisión de virus, especialmente cuando los estudiantes o el personal están en contacto cercano o interactúan con poblaciones vulnerables.

Estas medidas ayudan a minimizar el contacto cercano y reducen el riesgo de propagación del virus dentro de las escuelas.

 

3. Vacunación: La primera línea de defensa

La vacunación sigue siendo una de las formas más efectivas de prevenir enfermedades graves tanto por COVID-19 como por mpox. Los expertos en salud pública recomiendan que todos los estudiantes mayores de seis meses reciban la vacuna actualizada contra el COVID-19, que se espera apunte a la variante JN.1 y estará disponible a fines de agosto o principios de septiembre. También se deben considerar las vacunas contra el mpox, particularmente para aquellos con mayor riesgo de exposición.

Además de proporcionar clínicas de vacunación, las escuelas deben comunicar activamente la importancia de las vacunas a los padres y al personal, asegurando altos niveles de participación.

 

4. Capacitación y comunicación

Una comunicación clara es esencial para mantener un entorno escolar saludable. Las escuelas deben proporcionar actualizaciones regulares sobre los protocolos de seguridad, que incluyan la higiene de manos, el uso de mascarillas y el distanciamiento físico, a través de boletines, sitios web y señalización. Además, la capacitación para el personal sobre cómo reconocer síntomas y manejar posibles brotes puede ayudar a reducir la propagación de enfermedades en las instalaciones educativas.

 

5. Políticas para quedarse en casa

Es crucial comunicar a los padres y al personal que los niños o miembros del personal deben quedarse en casa si presentan síntomas de enfermedad, ya sea por COVID-19, mpox u otros virus respiratorios. Los recordatorios deben enfatizar que quedarse en casa cuando se está enfermo previene brotes y ayuda a mantener un entorno de aprendizaje saludable.

Las escuelas pueden minimizar las interrupciones en el progreso académico al promover opciones de aprendizaje virtual para los estudiantes que necesiten quedarse en casa debido a una enfermedad.

A medida que avanzamos hacia el año escolar 2024, el COVID-19 y el mpox presentan desafíos continuos para las escuelas. Sin embargo, al implementar un enfoque multifacético que incluya la mejora de la ventilación, el distanciamiento físico, el uso de mascarillas, la vacunación y una comunicación clara, las escuelas pueden reducir los riesgos de brotes y garantizar entornos de aprendizaje más seguros y saludables.

Para obtener recomendaciones más detalladas sobre la seguridad escolar y la prevención de enfermedades infecciosas, descarga nuestro eBook Lugares de Trabajo y Escuelas Más Saludables en Commit to C.A.R.E. y ayuda a mantener segura a tu comunidad este año escolar.